¡Regalos, regalos, regaloooooos!
Iván, este post te lo debía. 🙂
¿Por qué? Porque ha sido el artífice que ha conseguido que a mi colección se una una Game & Watch. ¡Bieeeeeeeeeen!
Sí señores. Aunque no se lo crean, con más de 200 consolas a las espaldas, no tenía ninguna.
¿Por qué? Porque soy enemigo de la especulación y mientras me siguieran pidiendo por una entre 50 y 150 pavos, pasaba de comprármela.
Y ha tenido que venir Iván y regalarme una. ¡Bieeeeeeeeen! 🙂
Muchas gracias chico. Pasas a ser, junto con mi amiga Mariola (saludos), culpable de que yo coleccione consolas.
Ella por regalarme la segunda que tuve y así convertirme en coleccionista, y tú por regalarme una Game & Watch que deseaba desde chico.
Bueno, no es exactamente esta la que está en mis recuerdos, pero los despierta igual. 🙂 Estoy más feliz que una perdiz. 🙂 Y encima la consola no venía sola.
Acompañándola, para que no se aburriera en el camino, venían:
El juego para la PSP God of War.
Una Game Boy Color.
Adoro todas las Game Boy y me compro todas las que puedo. (Mientras estén bien de precio).
Una consola de las que yo llamo ‘de supermercado’ que pasa a engrosar esa sección de mi colección.
Siento mucho decir, que este tipo de consolas les suelo quitar el ‘blister’, porque si no, no cabríamos en la casa.
Y una 3DS toda descuranjingada que ya me he entretenido en montarla y ver que lo que falla es la pantalla de arriba. Que posiblemente sea el cable, y que vale por lo menos 6 pavos más gasto de envío hacer el experimento.
Ahora mismo no me apetece gastarme los 6 pavos sólo por probar. Quedará aparcada hasta que vayan llegando a los rastro y pille alguna para desguace. (O intente hacer yo el cable).
Así que de nuevo. ¡MUUUUUUCHAS GRACIAAAAAAAS!