Charla con Maja Moldenhauer (MDHR) en #Gamelab2018

Todos hemos oído historias sobre unos principios humildes, que si se empezó en un garaje, que si eramos dos… pero oírla de primera mano es una experiencia de lo más enriquecedora.
Los hermanos Moldenhauer (Jared y Chad) tenían desde pequeños la ilusión de crear un videojuego, después de haber estado en diferentes trabajos en diferentes sectores, en las navidades de 2013 decidieron vender su empresa y dedicar todo su tiempo a realizar su sueño, unos meses mas tarde Maja se unió a ellos.
Un programador de fuera les echó una mano y tiempo más tarde pusieron un pequeño vídeo del prototipo en la red, de ahí recibieron la llamada ni más ni menos que de Microsoft…
Maja tiene un grado de “biomedical science” (aquí ciencias de la Salud) y un menor en física, cuando vio que no era lo suyo acabó en uno de los 5 bancos de Canadá, pero trabajo tras trabajo veía como ahí no había la pasión que quería demostrar gracias a su creatividad, cuando vio la oportunidad supo que debía estar ahí
Tuvo miedo, pero para ser honesta se tomó todo sus trabajos y estudios como una parte de su vida que la llevó a un destino, que fue hacer el juego.
La buena critica del juego aun le sigue sorprendiendo y se sigue preguntando cómo lo han logrado o cómo esta ahora en España hablando del juego, no tenían unas expectativas tan altas como el éxito que han cosechado.
El juego iba a ser con 8 bosses al estilo mega man, nada de lo que se puede ver hoy en el juego… cuando la gente respondió tan positivamente decidieron hacerlo más grande.
Chad reaccionó muy calmado pero ella dio vueltas por la casa emocionada, recuerda mucho esa llamada, también admite que Microsoft se arriesgó con ellos y les dio mucho soporte…
La visión de su futuro juego se basaba hacerlo sólo para PC bajo Steam, en ese momento no tenían un equipo detrás y su meta simplemente era esa… eran cuatro, con la ayuda de Microsoft, pero eran cuatro
Esa era la meta, presentar el juego para el E3 de ese año, el vídeo que presentaron cosechó un éxito rotundo y se siguió hablando de Cuphead durante mucho tiempo… pero ese éxito no les abrumó un mantuvieron una postura conservadora, no querían acabar viviendo en la calle…
En MDHR (abreviatura del apellido Moldenhauer) nunca hubo presión, nunca hubo un dictador en el grupo, todos ayudaban y todos colaboraban